miércoles, diciembre 06, 2006

Como Agua

Comienzo con alegría infinita, saltando de tus sonrisas a las mias, por un canal estrecho, como quien empieza a conocer algo con precaución, como un río que nace juguetón. Salpico en tu tristeza y seriedad gotas de buen humor.

Tropiezo de repente con las piedras del no poder, intentos de presa que agitan entrañas, aceleran aun más mis pasos, que sin quererlo pasan de ser gozo a enfado. Una extraña ira se apodera del líquido del que estoy hecho. Golpeo tus límites intentando romper las paredes que parecen querer aprisionarme, sin saber que si me libero de ellas quizás te pierda, quizás me pierda.

Acaricio tus mejillas, me cuelo entre tus gestos para llegar a lo más privado de tu ser, espiar tus secretos y contarte los mios en voz bajita, susurrandote "te quieros". Como si del ancho del canal se tratara, me presento como una balsa, sereno, tranquilo, amigo.

Sólo soy como un río que avanza por tu canal procurando no desbocarse, procurando ser amable, procurando ser feliz...y hacerte feliz a ti.

Tt

martes, diciembre 05, 2006

Justo antes de decir adiós

Tuve la oportunidad de despedirme, de ver como se apagaban las luces, de escuchar como se iban los recuerdos por la puerta, tras la caida del telón, como espectadores decepcionados por no haber podido escuchar una nueva canción o siquiera la repetición de alguna de las ya cantadas.
Sentí, en primera persona, como se apagaba el sol, como se enfriaba la tierra, como se creaba el silencio y la soledad.
Sólo esperaba el momento adecuado o quizás la valentía suficiente para pedir perdón, para decir lo mucho que me hacía falta, para gritar que aun...
Cerré bien los ojos, fuerte, con miedo, con rabia. Busqué el botón para rebobinar dentro de mi cabeza, deseé con todo mi cuerpo encontrar la solución, y así fue...así fue.
Si tuvieramos siempre la oportunidad de saber como nos ibamos a sentir, como se iba a quedar nuestro mundo, tan solo unos segundos antes de decir adiós...¿lo diriamos en algún momento?

Tt

sábado, diciembre 02, 2006

Duende
Ni la luna ahora creciente,
ni las alas de tus pies
hacen que estés sonriente
ni que vueles a la luz.
Duendecillo de ojos verdes,
duendecillo de alma azul.

Qué fue de tus travesuras,
qué de tu querer vivir,
qué de todas tus locuras
y de aquel inquieto humor.
Duendecillo de alma pura,
duendecillo sin pudor.

Quien calló tu alegre canto
silenció toda canción
y apagó el sol con tu llanto,
llanto que no seca el sol.

Si pudiera con mis manos
arrancar toda tu pena,
no conoce Dios los lazos
que impidieran tal faena.

Vuelve si quieres quererme
y si quieres que te quiera,
que yo trato de ser fuerte
resignandome a tu antojo.
Duendecillo de mi mente
Duendecillo caprichoso.

Tt
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